Para tener una producción de volantes publicitarios, debemos tener claro estos cuatro aspectos básicos:
Planificación previa
Hay que tener claro cuál, o cuáles son los objetivos del volante. Para crear este o estos objetivo debemos ser específicos, en cuanto a darle énfasis a un producto o servicio específico, como caballo de batalla o, aun mejor, una oferta.
Otro aspecto de la planificación es especificar cuáles son los destinatarios del volante, zona geográfica o punto de distribución, el tipo de persona que lo recibirá, género, edad, nivel social, etc.
Con esta información podemos establecer al menos de manera provisional la cantidad de personas a las cuales deseamos entregar la información.
Adicionalmente hay que tener claro la cantidad de información que deseamos transmitir, esto es importante para saber el tamaño ideal del volante.
También es importante que especifiquemos la cantidad de veces que queremos que nuestros prospectos vean la información. Entre más veces tengamos contacto con nuestros prospectos, más efectivo será el mensaje. Esta es la razón por la cual escuchamos una y otra vez los mismos anuncios en la radio, los leemos en la prensa, o los vemos en la televisión. La repetición es uno de los aspectos más importantes en una campaña de mercadeo.
Teniendo una idea de la cantidad de volantes que necesita, y el costo del mismo, puede ajustar de antemano las expectativas de calidad, cantidad de información, alcance y frecuencia del volante.
Dependiendo del tipo de cliente, la imagen que queremos presentar, y la cantidad de información que queremos transmitir, podemos definir la calidad y tamaño del volante que queremos realizar. Esto es, tipo de papel, cantidad de tintas, y forma del arte.
Dependiendo del alcance, la frecuencia y el presupuesto, podemos definir la cantidad de volantes a producir.
Diseño Gráfico
Para el diseño del volante, primero se debe ajustarse al tamaño establecido por el cliente, según su presupuesto, uno de varios tamaños estándar, o un tamaño especial.
La cantidad de colores, el tipo de papel, los lados de impresión y otros detalles dependiendo de la imagen que se desea transmitir y el presupuesto.
El mensaje debe ser directo, atractivo, con un llamado a la acción claro, efectivo.
Puede ser necesario utilizar diferentes textos en busca del que sea más efectivo.
Debe ajustarse a los colores del cliente, con una imagen clara, directa, pero sobre todo, atractiva, mostrando lo que se necesita mercadear.
También puede ser necesario experimentar con diferentes imágenes gráficas en busca de una mayor efectividad.
Producción
Las producciones Full color pueden ser en Impresión digital, en pequeñas cantidades, o en litografía tradicional, si las cantidades son mayores.
Se pueden producir en conjunto, planificando de antemano, diferentes mensajes e imágenes, y/o diferentes campañas, para lograr obtener en cantidad, el mejor precio por unidad.
Puede ser en papel mate, o papel brillante, más delgado si es por un lado, o un poco más grueso si es por ambas caras, el papel brillante y más grueso, proyecta una imagen de calidad, o papel mate y más delgado, si desea proyectar una imagen de austeridad.
Distribución
La distribución puede ser en puntos de alto tránsito, puerta a puerta, en el propio local, o una mezcla de estos.
Para la distribución, pude considerar métodos más personales, o más profesionales, dependiendo del presupuesto, la forma y el lugar de distribución.
Puede contratar a Correos de Costa Rica o empresas de distribución, ambos con distribución certificada.
Conclusión
Para obtener un volante que genere resultados, estos cuatro puntos son indispensables, desde los objetivos a la distribución, y todos los aspectos de producción.